28 enero 2020
El gobierno brasileño está preparando una Medida Provisional para extinguir el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI) e incorporar sus funciones a la Agencia Brasileña de Desarrollo Industrial (ABDI), transformándola en la Agencia Brasileña de Desarrollo y Propiedad Industrial (ABDPI). La propuesta, aún en discusión en la Secretaría de Economía, tiene como justificación la reducción de la máquina del poder federal.
La principal consecuencia es que las actividades realizadas anteriormente por el INPI dejarían el presupuesto de la Unión, dando lugar a otros gastos en el cálculo del límite máximo de gastos. Si el INPI se extingue, ninguna de sus facultades u obligaciones anteriormente financiadas por su presupuesto discrecional permanecería dentro del presupuesto de la Unión.
El texto prevé la terminación de cargos comisionados, las funciones de fideicomiso y las gratificaciones de INPI, haciendo que sus ocupantes sean despedidos y exonerados automáticamente. Sin embargo, la disminución de los gastos será limitada. Con esto, la economía efectiva esperada por el gobierno es de R$ 52 millones (€ 14 millones).
La Asociación de Jueces Federales de Brasil (AJUFE) y la Asociación de Jueces Federales de Río de Janeiro y Espírito Santo (AJUFERJES) han expresado públicamente su preocupación.
Según ellas, el INPI cuenta con una plantilla de funcionarios públicos sumamente especializados y reconocidos por su imparcialidad en la evaluación de las diversas solicitudes que se le presentan. Existe un temor fundado de precariedad de estos servicios si sus atribuciones son asumidas por la referida ABDPI, una entidad de carácter privado sin las garantías necesarias para la adecuada prestación de este servicio público esencial para el país.
En este sentido, la desestructuración del INPI tiende a dificultar el cumplimiento del Acuerdo sobre los Aspectos Relativos a los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio, compromiso internacional asumido por el país y que contribuye a que sea considerado un actor importante en el comercio internacional.
La ABAPI, la ABPI y la ASPI, asociaciones que representan al segmento de la propiedad industrial en Brasil, defienden, como siempre lo han hecho, el fortalecimiento del INPI a través de la efectiva autonomía administrativa y financiera de la entidad, promoviendo la modernización de las estructuras, la capacitación del personal y la reducción de los plazos de análisis y otorgamiento de derechos industriales. El desarrollo tecnológico y económico del país depende de un sistema de propiedad industrial eficiente e independiente y, en este sentido, es fundamental invertir en la valorización de la entidad que otorga los derechos de propiedad industrial.
Por lo tanto, las asociaciones argumentan que el 100% de los recursos recibidos de los usuarios del sistema, tales como los solicitantes de marcas y patentes, se apliquen al otorgante. Vale la pena recordar que el superávit acumulado a lo largo de los años ha sido mal utilizado para pagar la deuda pública federal. Así, las asociaciones reafirman su apoyo a las propuestas de reorganización del INPI que buscan asegurar la eficacia del sistema de propiedad industrial, manteniendo la exención e imparcialidad de la entidad y no extinguirla.
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