Si quieres tener presencia en Internet, lo normal es que elijas un dominio que coincida con tu nombre, el nombre de tu compañía o tu marca.
Si se hace con previsión, la marca y el dominio se registrarán casi a la vez. Pero no es infrecuente registrar primero el dominio (porque nos gusta) y al ir a registrar la marca tener problemas con el registro y viceversa.
Posibles situaciones
Se pueden dar las siguientes situaciones:
- Tener un dominio y que el titular de una marca anterior nos lo reclame
- Tener una marca y que el dominio lo tenga un tercero
- No poder registrar la marca del dominio elegido
- Tener una razón social (el nombre de la compañía) registrado en el Registro Mercantil y que un titular de una marca idéntica o similar nos reclame el dominio
¿Cuál es la solución?
La estrategia. Lo más importante es la marca: concede un derecho de exclusiva. Y a ser posible elegir marca y dominio a la vez. En el caso de los dominios hay más posibilidades de elección pues si el “.com” no está disponible, podemos optar por el “.es”, el “.net” o uno de los nuevos dominio p.e. “.web”, “.technology”, por citar algún ejemplo.
Registrar la marca es por lo tanto el primer paso
Sin marca, el futuro del dominio puede ser incierto. Y lo que no se desea en Internet es la inseguridad jurídica.
Comentarios
No hay comentarios