Pensamiento divergente en el sector de la automoción

Existen ciertos sectores concretos en los que el desarrollo parece haberse estancado desde hace unas décadas, salvo por ciertas excepciones. Un ejemplo de estos sectores puede ser el mundo de la automoción en el que, si bien hay innovaciones muy claras relativas a asuntos como el coche eléctrico o los sistemas de conducción autónoma, hay muchas soluciones que se dan por “inamovibles” y sobre las que pocos avances ha habido desde que se instauraron en el siglo pasado.

A este respecto, cabe recordar la famosa frase de “Todo lo que se podía inventar, ya está inventado”, atribuida (parece que erróneamente) a Charles H. Duell, comisario de la UPSTO, allá por 1890. Dicha máxima se podría suponer cierta para algunas soluciones que, simples a la par que eficaces, conviven con nosotros desde hace tiempo. Sin embargo, aún existen inventores que se plantean si no existen mejores alternativas, dando lugar a invenciones que, si bien puede que no acaben comercializándose de manera masiva, sí que merece la pena que valoremos por su arrojo a la hora de desafiar el orden establecido.

A este respecto cabe resaltar el intento de redefinición del limpiaparabrisas, plasmada por parte de Tesla en su patente US 11,110,896 (concedida en septiembre de 2021). En dicha patente se recoge la utilización de un láser para la eliminación de partículas en el parabrisas de un vehículo.

Figura 1. Imagen extraída de la patente US 11,110,896 de Tesla.

Tampoco son desdeñables los avances de la compañía Michelin en la redefinición de algo tan instaurado como el neumático, fuente de quebraderos de cabeza por posibles pinchazos y por su necesidad de monitorización a la hora de mantener las presiones correctas. Así pues, Michelin lleva años trabajando en desarrollar un neumático que no requiera de cámara de aire, sustituyendo ésta por diferentes combinaciones de filamentos de goma. Parece ser que la intención de Michelin es la comercialización de este tipo de neumático (¿podremos seguir llamándolo así? La lógica indica que no) para 2024, sin embargo, podemos encontrar patentes de Michelin sobre este tipo de soluciones ya desde la década de los 80 (EP0399383 de 1989).

Figura 2. Imagen extraída de la patente de Michelin de 1989.

La más reciente de las solicitudes de este desarrollo por parte de Michelin (que haya sido publicada a la fecha de escritura de este artículo) es del año 2018 y tiene una apariencia más similar a las imágenes publicitarias del que parece será el producto definitivo que se comercialice.

Figura 3. A la izquierda, imagen extraída de la solicitud de Michelin de 2018 y a la derecha imagen publicitaria del producto a comercializar.

En definitiva, limpiaparabrisas que pierden su carácter físico y operan por láser, neumáticos que habrán de renombrarse porque pasarán a prescindir de gas alguno en su interior, así como espejos retrovisores que sustituyen los espejos por una combinación de cámara y pantalla y otro gran número de desarrollos novedosos que vienen a agitar lo que solemos dar por sentado en la industria de la automoción, no hacen más que reafirmar que, ni mucho menos todo está inventado y que aún queda rango de mejora incluso en lo que damos como plenamente establecido e inamovible.

El mundo de las invenciones y mejoras técnicas sigue adelante y es imprescindible para el desarrollo de la sociedad. La misma importancia tiene su desarrollo como su ulterior protección para hacer de ello un proyecto rentable y que tanta investigación y esfuerzo valgan la pena.

Actualidad Patentes Doctrina de H&A